Felicidades a todas las personas que ejercen la Profesión de la Abogacía, en éste nuestro día, que es tan elitista que NO todos lo merecen, que NO todos los demás sectores de la Sociedad lo saben, muchos ni lo recuerdan y menos nos felicitan y que otros más celebraban como rigor de mortaja en fiestas paganas de la burocracia administrativa y académica en épocas anteriores de abundancia, ahora en la austeridad creemos que ya no.
Felicitamos en especial a los Juristas, a los apóstoles de la postulancia que son los Litigantes, a los buenos Jueces, a los sabios Secretarios Secretarias, a los incansables Fiscales, a los letrados de la Academia sean Maestros y hasta Doctores; a los Insurgentes, a los Defensores de los indefensos, a los de la eterna búsqueda de la Justicia finita, a los soñadores de la Infinita, a la defensoría pública y las legiones de servidores públicos que se añejan en las oficinas rancias de la administración gubernamental.
En especial distinción a los que NO se han titulado por alguna causa y siguen trabajando, a los que NO cobran sin hacer nada, a los que NO transan con beneficios propios, a los que NO lucen sus joyas, carros y relojes, zapatos y bolsas, a los que comparten sus valores, dan la mano y dejan ver su rostro limpio y orgulloso, a los que muestran en lugar de sus Diplomas, Títulos y credenciales sus Criterios, Ideas, Ideales, Argumentos y Sentencias a favor.
Felicidades a las Abogadas y Abogados que ejercen la Abogacía, que son festejados y reconocidos no solamente por sus colegas, sino por miembros de la Sociedad Civil.
La Abogacía dignifica, el trabajo dignifica, los valores morales, sociales y cívicos dignifican, la Justicia, La Equidad, La Igualdad, La Legalidad, La Libertad y el Sentido Común, significan todo.